Que risa de huesos- Allan Ahlberg

Este cuento narra, como en una oscura ciudad, vivía un grupo de dos esqueletos, un esqueleto grande y un esqueleto pequeño, con su perro esqueleto en un oscuro sótano de una casa. Estos salían de noche a jugar entre ellos mismos. Una noche decidieron salir a llevar a su perro a pasear en el parque, pero mientras jugaban con el, el perro tropezó y se descompuso en todos sus huesos. Los dos esqueletos trataban de ayudarlo montando sus esqueletos a su forma normal y después de varios intentos lo lograron. Luego de esto los esqueletos junto a su perro deseaban continuar jugando. Decidieron jugar a asustar a personas, pero al darse cuenta que a sus alrededores no había nadie más que ellos, decidieron jugar entre ellos mismos. Así fue toda su noche jugaban entre si asustándose el uno al otro. Para ellos esto fue muy divertido. Cuando vieron que ya habían jugado bastante y se encontraban cansados, decidieron volver a su oscura casa, a su oscuro sótano.



Actividades

1. Aprendamos los huesos de nuestro cuerpo- Llevar a los estudiantes parte por parte de nuestro cuerpo e ir aprendiéndonos los diferentes nombres de los huesos que componen nuestro cuerpo.
2. Vamos a crear nuestro esqueleto- Proveerle a los estudiantes papel de estraza y que junto a un adulto vayan creando poco a poco un esqueleto de su tamaño. Luego de esto colorearlos y exponerlos en el salón de clases.
3. Cantemos "Funny Bones"- permitirle a los estudiantes que escojan una parte del cuerpo y que ellos mismos usando su creatividad puedan componer una canción con los nombres de los huesos que componen esa parte del cuerpo que ellos escogieron.