Esta historia trata acerca de un pequeño búho a quien le da miedo la oscuridad. Le da tanto miedo que ni siquiera se atreve a abrir los ojos. Al pequeño búho le ha llegado el tiempo de aprender a volar. Incluso sus amiguitos del bosque comienzan a motivarlo. Curioso, el pequeño búho se atrevió a escuchar todo lo que la noche tenía para el. Impulsado por un pequeño accidente, al curioso, pero temeroso búho, no le queda de otra que enfrentar su miedo. Y pasa a ser de miedoso, a valiente. Finalmente, logra vencer su miedo y abre sus grandes alas. Contemplando todo lo que había escuchado con sus ojitos cerrados, pero ahora lo puede apreciar desde las alturas.
Actividades para realizar:
1- Discutir con los niño acerca de la historia y si le tienen miedo a la oscuridad al igual que el pequeño búho. Hacer preguntas y que ellos expliquen qué es lo que les asusta de la oscuridad o de alguna otra cosa. Explicarle a los niños que la oscuridad es parte también de nuestro diario vivir y que hay cosas muy interesantes que solo podemos apreciar cuando todo está oscuro.
2- Preparar un ambiente en el salón de clases donde en su mayoría haya oscuridad (con las debidas precauciones). Ambientar el salón con sonidos que solo podremos escuchar en la noche, por ejemplo: el sonido de los coquies, aves que vuelan de noche, los grillos, en algunas ocasiones el sonido de la lluvia, la luz que emiten las luciérnagas (o cucubanos), entre otros . Darle a los niños una experiencia positiva y motivarlos a tener pensamientos positivos.
3- Dibujar acerca de las cosas que les dan temor. Luego que añadan otros dibujos con colores vivos que representen pensamientos positivos para ellos. Que mezclen sus dibujos y vean que dentro de las cosas que a ellos les parecen feas o malas, tambien hay cosas positivas en las que pueden pensar.
Actividades para realizar:
1- Discutir con los niño acerca de la historia y si le tienen miedo a la oscuridad al igual que el pequeño búho. Hacer preguntas y que ellos expliquen qué es lo que les asusta de la oscuridad o de alguna otra cosa. Explicarle a los niños que la oscuridad es parte también de nuestro diario vivir y que hay cosas muy interesantes que solo podemos apreciar cuando todo está oscuro.
2- Preparar un ambiente en el salón de clases donde en su mayoría haya oscuridad (con las debidas precauciones). Ambientar el salón con sonidos que solo podremos escuchar en la noche, por ejemplo: el sonido de los coquies, aves que vuelan de noche, los grillos, en algunas ocasiones el sonido de la lluvia, la luz que emiten las luciérnagas (o cucubanos), entre otros . Darle a los niños una experiencia positiva y motivarlos a tener pensamientos positivos.
3- Dibujar acerca de las cosas que les dan temor. Luego que añadan otros dibujos con colores vivos que representen pensamientos positivos para ellos. Que mezclen sus dibujos y vean que dentro de las cosas que a ellos les parecen feas o malas, tambien hay cosas positivas en las que pueden pensar.
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